La conciencia ambiental es una de las características que con mayor claridad marca a las actuales generaciones y las distingue de todas las anteriores. Hoy nuestros estudiantes tienen una notable conciencia sobre la vulnerabilidad en la que se encuentra el planeta en que vivimos. Además, conocen que la sostenibilidad de la vida no es independiente de las acciones u omisiones del ser humano.
El sistema educativo juega un papel fundamental en estimular y promover esta conciencia ambiental. Con un adecuado sustento científico, promoviendo una actitud ética frente al medio ambiente y garantizando que las niñas, niños y jóvenes adquieran competencias, sensibilidad y conocimientos necesarios para ser miembros responsables no solo de la sociedad, sino del ecosistema que la alberga.
El proyecto Basura Cero, es una política integral de manejo de residuos que apunta a reducir progresivamente el enterramiento y la incineración de residuos sólidos urbanos, hasta llegar a cero. Basura Cero adopta una serie de medidas en cada etapa, desde que se producen hasta que se consumen y desechan. Este plan busca aplicar medidas en todo el circuito de los materiales, apuntando por un lado a reducir drásticamente la cantidad y toxicidad de los residuos que generamos, y por otro a que todo lo que se deseche vuelva al circuito productivo o a la naturaleza de forma segura.
Adicionalmente, el proyecto incluye reducir el consumo y desperdicio de recursos como agua y energía eléctrica, que también son una prioridad. Por tanto, se contempla un ahorro en las instituciones educativas con el personal educativo (estudiantes, docentes, administrativos, personal de apoyo y personal del bar) y con sus respectivas familias.
LA CLAVE ES REDUCIR LA GENERACIÓN DE BASURA
EL PROYECTO LOGRA UNA REDUCCIÓN DE MÁS DEL 50% DE BASURA
